Después de Cocina de la Diáspora, Dalal Halabi vuelve a la mesa con un libro íntimo y desbordante de sabor. Cocina Mestiza no es un recetario tradicional: es su playlist personal de recetas, un recorrido por platos que nacen del cruce entre herencia familiar, antojos, cultura pop, intuición y mucha creatividad. Como toda buena playlist, este libro también tiene su banda sonora: una lista de Spotify creada por la autora para acompañar cada momento en la cocina. Las recetas están pensadas para distintos momentos del día -desayunos, brunch, almuerzos, once comida, cenas, postres, tragos y bajones sin horario- y entre sus páginas desfilan preparaciones como labne y tomates asados, gnocchis mongolianos, shakshouka con espinacas, scones con zaatar y miel, un kuchen de nuez que ya va en su tercera generación y las infaltables roscas de su abuela Nena. Son platos que se adaptan a lo que hay en casa, que no exigen perfección, pero sí sazón. Porque como dice Dalal: "si no tienes especiero, no tienes gracia". Cocina Mestiza celebra el acto de cocinar con las manos y con historia. Aquí no hay reglas estrictas, solo ganas de gozar, mezclar y reconectar con los sabores que nos definen. Es un libro hecho con cariño, humor y memoria, donde lo más importante no es seguir una receta al pie de la letra, sino dejar que la intuición y el gusto guíen el camino.