El padre de Jeri Crosby fue asesinado hace veinte años y su caso sigue sin resolver. Jeri tiene un sospechoso al que ha estado siguiendo de manera obsesiva durante dos décadas. En el camino, ha descubierto otras víctimas y ahora quiere poner el caso en manos de la investigadora Lacy Stoltz. El culpable es inteligente, paciente... y conoce la ley. Se trata de un juez de Florida de la jurisdicción de Lacy y tiene una lista con los nombres de todos sus objetivos, personas inocentes que le han ofendido de alguna manera. ¿Podrá detenerle Lacy sin convertirse en su próxima víctima?